http://www.restauranteelcampero.es/
Con este restaurante me quedo sin palabras. Era uno de esos sitios a los que deseaba visitar pero cuando de manera improvisada decido ir, llamas a última hora para reservar y… cual es mi sorpresa!!! que no hay mesa hasta siguiente mes. Pensando en ésto hice la reserva un mes antes. Fijaros si tenía ganas.
He ido, por suerte, a muchos restaurantes y bares conocidos, motivo por el cual me decidí a crear esta página, pero os aseguro que es de los mejores sitios donde he comido. Me llevé una grata sorpresa desde que llegué hasta que me despedí y por supuesto ya estoy pensando en volver.
Si me preguntáis relación calidad-precio yo os diría que es un poco carillo pero ya sabéis que el atún rojo de almadraba es carísimo y éste sí era rojo, rojo,(thunnus thunnus) no estaba tintado con salsa de remolacha. Es cierto que en cuanto a los vinos el precio altillo, creo que se exceden un poco (no solo aquí, sino en la mayoría de los restaurantes) y eso hace que el cliente se piense pedir o no una botella, NO AYUDANDO AL SECTOR BODEGUERO lo cual es una pena.
Una anécdota muy graciosa que nos pasó con uno de los camareros (que tenía todo el arte de Cádiz) que nos atendió, en concreto con Javi… al enterarse que éramos de Bollullos cerca del Rocío, no pudo contenerse y nos comentó que él estuvo en el Rocío de pequeño con 4 años con su padre y que solo su recuerdo le ponía los pelos de punta y yo sin más le contesté…”a ti se te han puesto los pelos de punta recordando el Rocío y a mi se me han puesto comiendo este atún” porque la verdad sea dicha… qué exquisiteces todos y cada uno de sus platos!!!
Comenzamos con el aperitivo, gentileza del Campero, las exquisitas y maravillosas huevas de atún, regado con una copa de manzanilla de Gabriela Oro, Más adelante acompañamos el resto de los platos con una botella de castillo de San Diego para, finalmente, culminar con estos deliciosos postres y un espectacular vino dulce Pedro Ximenez… sobran las palabras… un delirio para el paladar.
Sin más os dejo fotitos para que podáis comprobarlo por vosotros mismos, aunque sin degustarlos, eso sí!
No lo dudéis, si vais a pasar por allí, no os equivocaréis! La sonrisa al terminar está mas que asegurada.