Hoy os quiero enseñar un pequeño truco que vi en un restaurante en el que estuve recientemente. Me pusieron un solomillo y encima del mismo venían unos extraños filamentos fritos que servían de adorno al plato. Se trataba de espaguettis fritos.
Este truco es muy fácil de hacer y os vendrá bien para darle un toque profesional a vuestros platos. Además, curiosamente, saben a patatas fritas.
Para llevarlo a cabo simplemente tenéis que cocer unos espaguettis en agua con mucha sal. Cuando estén en su punto los echais sobre aceite muy caliente y pasados entre 5 y 10 segundos los apartais. El resultado es lo que veis en la foto.
Probadlo y ya me contaréis.